FERROL360 | Lunes 4 noviembre 2013 | 20:01
Doce placeros y sus familias, mantienen desde el sábado un encierro en el interior de la plaza de abastos para protestar contra las condiciones del traslado provisional y forzoso que les impone el Concello de Pontedeume.
El consitorio ha decidido rehabilitar y acondicionar el inmueble ubicado en la plaza del Conde. Este mismo lunes era la fecha elegida para llevar a cabo las obras, cerrando así el mercado y proponiendo las lonjas de Raxoi -cercano al albergue de peregrinos- como alternativa para la actividad de los placeros.
Sin embargo, los trabajadores no están conformes con las condiciones que les plantea la corporación local. Se niegan a trasladarse al lugar provisional hasta que no alcancen un acuerdo que les garantice mantener sus puestos de trabajo y regresar a sus antiguas dependencias una vez finalizadas las obras. Sospechan sobre la posibilidad de destinar los bajos del antiguo mercado a una gran superficie comercial.
Un grupo de afectados, se reunía esta mañana con el alcalde Gabriel Torrente para acordar una solución pero el encuentro no resultó fructífero. La representante legal de los placeros, Inés Díaz, explicaba a los medios que el gobierno no les permitió ver el expediente administrativo y ahora deberán solicitarlo por Registro. Además, aclaró: «No pedimos esta obra, el Ayuntamiento decidió hacerla. Somos los primeros beneficiados por estas obras pero con garantías».