FERROL360 | Lunes 23 mayo 2022 | 22:08
Satisfacción entre los transeúntes que este lunes paseaban por las aceras de la plaza del Callao y observaban cómo los coches rodaban por el vial sin dificultad apenas un mes después de que empezasen las obras para terminar con el adoquín. «Ahora, ojalá que dure», comentaba un hombre, no sin cierto escepticismo.
La primera sorpresa de la apertura la ha protagonizado el pintado y la eliminación de varias plazas de aparcamiento, así como la optimización de otras. En su margen derecho, la plaza reserva primeramente el espacio para los buses, pero también traslada allí la plaza destinada a personas con movilidad reducida y reserva el resto para la carga y descarga.
Antes, había un total de 9 aparcamientos para turismos en ese margen. A la izquierda, ahora los vehículos tendrán que aparcar en batería y marcha atrás. Si antes cabían unos 14, ahora se han podido delimitar algunos más. En el centro de la calzada predomina el hormigón y el adoquín se ha quedado simbólicamente en una hilera triple a cada lado.