M.C. | Ferrol | Lunes 30 julio 2018 | 22:00
No hay nada como una buena tumba de un dictador a punto de ser abierta en verano, cuando las noticias escasean y todo es susceptible de llenar portadas. Este mes de julio, que da sus últimos coletazos, ha estado marcada por la decisión del Gobierno de Pedro Sánchez de retirar del Valle de los Caídos los restos de Francisco Franco.
A partir de ahí, gracias al genial trabajo de la periodista Patricia Hermida para El Correo Gallego, nos enteramos de que en Catabois había un nicho de los Franco y, claro, las alertas saltando porque cabía la posibilidad de que el dictador acabase descansando en paz en Ferrol. Portadas de todos los medios nacionales, aparición del alcalde, Jorge Suárez, en Espejo Público. Comidilla en las barras de los bares y las redes sociales.
La familia Franco Bahamonde tiene una tumba en el cementerio de Ferrol. En su ciudad natal, el dictador cuenta con un espacio para el entierro de sus restos. La tumba no tiene fechas ni nombres, como nos cuenta @Patri_Hermida https://t.co/LIYbaMLsLe pic.twitter.com/NhpuVFsllE
— El Correo Gallego (@elcorreogallego) 7 de julio de 2018
Pues bien, este lunes el pleno del Concello echaba el freno a las especulaciones. A instancias de una moción presentada por el BNG se acordaba mostrar la oposición formal a la acogida en el cementerio municipal de los restos del Caudillo (en el caso de que la familia lo llegase a solicitar) e iniciar los trámites administrativos para recuperar la propiedad municipal del nicho, que el Ayuntamiento ferrolano le había regalado a Franco.
PP y Ciudadanos, abstenciones y votos en contra
Los 13 votos a favor del Gobierno, el PSOE, el BNG y la no adscrita Esther Leira sacaron adelante la propuesta, que también incluía la retirada de la simbología franquista que todavía permanece en algunos rincones de la ciudad y la petición a varias webs -como Facebook, por ejemplo- para que deje de incluirse El Ferrol del Caudillo como topónimo. PP y Ciudadanos se han abstenido.
El PSOE también presentó otra moción en la que se instaba a la retirada de los símbolos de la dictadura aprobada por todos los grupos y la abstención del PP, con el punto aparte de quitar las fotos de los alcaldes franquistas de la Sala de Alcaldes del Palacio Municipal. Todos a favor excepto Partido Popular y Ciudadanos, que votaron en contra.