Ian Mackay, en un lance del Racing-Deportivo de este verano (foto: Mero Barral / 13fotos para Ferrol360)
En un excelente momento de forma y con el ánimo en la cantidad adecuada. En el regreso a los entrenamientos, Ian Mackay ha valorado este martes que el Racing obtuvo en Guijuelo tres puntos que saben a gloria. «Veníamos de no ganar en casa y tenemos que ganar para no alejarnos de los primeros», apunta a Ferrol360 de cara al encuentro del domingo ante el Pontevedra.
En tierras castellanas completaron «un buen partido, práctico». Fue en un campo «complicado» donde se hicieron no solamente con los puntos en liza, sino que también consiguieron «crear bastantes ocasiones, lo que nos estaba faltando». No descuida que hay «muy buen vestuario este año, es espectacular».
Un grupo que opta por «apretar» en las sesiones de trabajo y que ya piensa en los de Luisito, «buen equipo» que el pasado fin de semana doblegó a un San Sebastián de los Reyes que estaba rindiendo a gran nivel. Ese triunfo, sostiene el portero, permitirá que los de la ciudad del Lérez lleguen a Ferrol «con más tranquilidad», pero «va a ser un partido complicado».
Ian Mackay, en una imagen del amistoso de este verano entre O Val y Racing en Sinde (foto: Mero Barral / 13fotos para Ferrol360)
Aunque al Racing le «está faltando gol», es capaz de ir «rentabilizando los que metemos», refrenda. No detecta «mucho» cambio con respecto al curso pasado, pero «quizá los fichajes se metieron muy rápido en el grupo, están aportando muchísimo». Mientras, «los que nos quedamos estamos en un buen nivel; las cosas están funcionando porque estamos todos a una».
El guardameta encara un arranque de temporada bien distinto al anterior, marcado por su grave lesión. Ahora tiene «mucha ilusión por hacer un buen año; me encuentro en forma y con muchísima ilusión, hacía bastantes años que no tenía esa ilusión por demostrar de verdad quién soy».
Ian Mackay, en un entrenamiento del Racing en A Malata (foto: Mero Barral / 13fotos para Ferrol360)
Las bases de una tarea con la que, en su opinión, «los goles van a llegar más fácil». De hecho, coincide en apreciar que en el vestuario «no hay titulares y suplentes». «Cualquier jugador que entre está dando el mismo nivel o mejor que el que estaba jugando», opina el cancerbero.
Una veintena de efectivos «con los que puedas contar» para que «revolucionen el partido». Indiscutible bajo palos en el plantel que atesora por el momento la condición de menos goleado, deja una máxima clara sobre ese fondo de armario: «Cuanto más arriba estemos, más nos vamos a beneficiar».