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FERROL360 | Lunes 14 septiembre 2020 | 19:14
La CIG ha llevado a cabo este lunes una concentración en la base de la empresa Servicios Sanitarios del Cantábrico, encargada de prestar el servicio del 061 en la comarca, por un caso de «acoso laboral e represión sindical» a un empleado.
La movilización de apoyo al trabajador se enmarca dentro del proceso previo a la judicialización del conflicto laboral. Y es que este lunes se ha celebrado el acto de conciliación en el SMAC, entre el empleado y la compañía, que ha finalizado sin un entendimiento entre las partes.
Según indican desde la CIG, la empresa acusa al trabajador de una falta grave, con una sanción de seis días de trabajo y sueldo, por golpear a otra ambulancia durante la activación de un servicio. Los hechos tuvieron lugar el pasado 4 de julio y el trabajador puso en conocimiento de la empresa lo ocurrido. Días más tarde, el 22 de julio se procedió a la apertura de un expediente y a la imposición de la sanción.
Beatriz Fernández, responsable de la Federación Fgamt Ferrol, ha destacado que «en 24 anos o traballador non tivo apercibimento, nin sanción algunha» y ha añadido que «os seus compañeiros afirman que o golpe do vehículo foi totalmente fortuito».
Fernández ha cesurado que la empresa no realizó ninguna investigación sobre el golpe e «impón unha sanción que o único que persegue é facer recuar ás traballadoras e traballadores que reclamen os seus dereitos».
La representante sindical ha advertido que el conflicto viene de años atrás «cando o traballador, exercendo as súas funcións como delegado de persoal, interpuxo varias denuncias en Inspección de Traballo que supuxeron para a empresa a imposición de sancións económicas e administrativas».
Durante la conciliación, la empresa ha propuesto reducir la sanción a tres días pero el empleado ha decidido ir a juicio.
